Que lo asiático lleva tiempo de moda ya nadie lo duda. Prueba de ello es la cantidad de adeptos que consigue su cultura gastronómica, y en consecuencia, una gran cantidad de nuevos locales cuyos números de teléfono ya forman parte de nuestra agenda.
Pero ese continente no sólo sorprende por su gastronomía. En arquitectura y en concreto en el diseño de interiores, el país nipón por ejemplo, siempre ha sido un referente al que mira Europa.
Hoy me gustaría retomar un tema del que ya hemos hablado anteriormente: la iluminación. Un concepto que considero fundamental en la concepción del diseño global del proyecto de interiorismo.
No obstante, hoy no quiero hablarte de técnicas de iluminación, potencias o flujos luminosos. Quiero que te deleites y compruebes que en muchas ocasiones, el buen diseño no es algo al que sólo unos pocos pueden adquirir sino que sólo hacen falta tener buenas ideas.
El proyecto “PET LAMP”, liderado por el diseñador Álvaro Catalán de Ocón ponen esta vez su punto de mira en Japón. Sus lámparas, creadas a partir de botellas de plástico recicladas, se materializan de forma artesanal siguiendo las formas y tradiciones presentes en cada país donde se desarrolla este proyecto (Chile y Colombia entre otros).
Su nueva colección Kyoto nos trae a casa toda la sobriedad de Japón, con colores naturales y empleando también el uso del bambú.
En esta nueva serie se hizo un esfuerzo mayor por ocultar la estructura de la botella de plástico lo que le confiere a la luminaria una mayor sensación de ligereza y de flotabilidad en el espacio.
Si quieres saber más sobre este singular proyecto y cotillear el resto de colecciones te invito a que entres en su página web y descubras un poco más del otro lado del planeta, seguramente te lleves una sorpresa! http://catalandeocon.com/
Deja una respuesta